Te echo de menos. Te acabas de ir, pero te huelo en mí. La cama huele a nosotros, a ti en mí. Me levanto y me visto. Me siento frente a la ventana y te veo marchar. Estoy transformada, la euforia me invade y soy capaz de olerte en la distancia... pero es sólo el aroma que dejó tu abrazo en mí. Noto mi perfume porque no acostumbro a llevarlo y huelo también mi pelo mientras lo cepillo. Me estremezco por dentro al recordar, te quiero en mí. La cocina huele a café recién hecho, el que te había preparado. Veo la tele, escribo. Y cuando ya te había olvidado te huelo en mi piel y en mi ropa y te deseo de nuevo.
martes, 21 de septiembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)


2 comentarios:
Me gusta. Me recuerda a lo que me pasa a mi a veces.
Por cierto, tienes un premio otorgado por mi, para ti, pasa por mi blog y recógelo cuando quieras.
Espero que te guste.
Un beso
Gracias, guapa, ya lo he visto, a ver si descubro cómo pegar la foto y entrego los míos :P
Publicar un comentario